jueves, 29 de octubre de 2015

Jardín de senderos que se bifurcan



En el apartado previo Jorge Abelardo Ramos nos viene hablando de la concepción política que Bolívar tenía sobre la última y más dificultosa conquista de su campaña militar, en los hechos ejecutada por Sucre, el Alto Perú (hoy Bolivia): que las provincias de la gran nación latinoamericana se corresponden geográficamente con los virreinatos pre-existentes. Y por lo tanto, como Alto Perú correspondía al Virreinato del Río de la Plata, la ocupación de las fuerzas bolivarianas sólo debe ser militar y de transición, en espera de la decisión de su autoridad política legítima: a la sazón el gobierno de Rivadavia en Buenos Aires.

La que sigue es la transcripción completa del capítulo 14,  La oligarquía de Buenos Aires renuncia al Alto Perú, en la Sección III del imprescindible Historia de la Nación Latinoamericana, enorme libro que marcó a una generación.

Pero el error de Bolívar no residía en su concepción de la cuestión nacional en América Hispánica, sino en la actitud que iría a adoptar la burguesía porteña. Nadie, ni siquiera el Libertador, podía concebir, a pesar de lo bien que conocía Bolívar el carácter político y social de la oligarquía del Plata, que ésta renunciara espontáneamente a privarse del Alto Perú, automutilar la soberanía argentina. Pero asi ocurrió, en efecto. Al informarse el Congreso rivadaviano de los acontecimientos de Ayacucho, resolvió enviar una delegación formada por el general Alvear y Alvarez Thomas a cumplimentar a Bolívar sobre sus triunfos

Al mismo tiempo, debía solicitar al Libertador su apoyo para concluir la guerra con el Imperio del Brasil, que ocupaba la Banda Oriental. En el mismo acto, el Congreso rivadaviano declaraba el 9 de mayo de 1825 "que aunque las cuatro provincias del Alto Perú han pertenecido siempre a la Argentina, es la voluntad del Congreso General Constituyente que ellas queden en plena libertad para disponer de su suerte, según crean convenir mejor a sus intereses y a su felicidad". 

Esta resolución ratificaba la posición separatista asumida por Sucre, opuesta a la política bolivariana de formar grandes Estados en la América Meridional y confederarlos a todos ellos. El gobierno rivadaviano, que no era representativo de las provincias, por lo demás, envió a Sucre uno nota felicitándolo "por la habilidad y buen juicio con que ha sabido garantizar los derechos de los pueblos que ha libertado". 

La rica factoría porteña se encogía de hombros, estrechaba los cordones de su bolsa y dejaba a los "cuícos" que se las arreglasen solos.

Alborozado, Sucre se dirigió a su jefe, subrayando con ingenua satisfacción su acierto: "Los documentos oficiales que hoy remito manifestarán a usted que mis pasos, en lugar de ser falsos, como antes se creyó, han marchado sobre conocimientos del estado del país, y que el Congreso y el Gobierno argentinos, no sólo han confirmado, sino que han aplaudido mi conducta". 

La provincia de Tarija, por exigencias de Bolívar, no quedaba incluida en la maniobra separatista. Pero se desprendió al año siguiente de la soberanía argentina, casi al mismo tiempo que la Banda Oriental. ¡Bolívar no podía creer en la resolución porteña! "Bolívar miró la noticia de esta ley como una patraña que habían forjado en Córdoba o Salta. ¡No lo podía creer! Tuvo Sucre que enviarle en copia auténtica los documentos. Se rindió entonces a la evidencia". 

No repuesto aún de su sorpresa, al festejar la llegada de la misión argentina encabezada por Alvear en Potosí, el Libertador brindó por "el Congreso de las Provincias Unidas del Río de la Plata cuya liberalidad de principios es superior a toda alabanza y cuyo desprendimiento con respecto a las provincias del Alto Perú es inaudito".

¡Inaudito! Tal era en efecto el desprendimiento de la oligarquía porteña, que si carecía de concepto territorial de la Nación era justamente porque no era una clase nacional. La noción del espacio geográfico soberano aparece cuando se han generado las condiciones de producción capitalista requeridas para ese espacio, cuando el interés dinástico anticipa las condiciones políticas de esa soberanía, o cuando un puñado de patriotas afirma los derechos de la nación.

El regionalismo exportador en América Latina demostraría que sólo era apto para formar Estados, en modo alguno Naciones. 

El diario rivadaviano El Nacional se preguntaba el 16 de marzo de 1826 si el Deán Funes podía y debía ser diplomático de un "gobierno extranjero". Funes respondió en El Ciudadano: "Sí, debe serlo, porque la causa de Colombia es la causa de las Provincias Unidas". 

Recuérdese a ese respecto que Monteagudo había declarado que su patria era toda América y que San Martín estipuló en la Constitución del Perú que eran ciudadanos del Perú todos los nacidos en América.

190 años más tarde el debate continúa.

miércoles, 28 de octubre de 2015

Oración para Daniel



Daniel, hoy el spot te lo hacemos nosotros.

Vos PODÉS.

Vos podés ser el Presidente de la Nación Argentina.

PODÉS. Definitivamente.

Te sobra paño. Coraje. Conocimiento. Ganas. Voluntad. Condiciones.

Tenés la edad, la experiencia, el temple, la fuerza para ser nuestro presidente, el presidente de todos.

Inspirá hondo. Ese es aire argentino. Viene de lejos, de Cuyo, de la Puna, lo empujan los vientos patagónicos, lugares donde hay miles de pibes y pibas para los que sos la única esperanza honesta.

Daniel vos podés. Acordate de Néstor. Pateá escritorios. Putealos. Incluso a los que dicen ser sus más fieles seguidores.

Mirá a los que te rodean a los ojos, pediles que se callen. Y que te sigan. Mirá a los que intentan darte consejos, los bien y los malintencionados, deciles que ya basta, que se callen. Ya basta de advertencias. Son ellos los que tienen que asesorarse: se suben o no se suben.

Mirá a los adversarios, fulminalos con la mirada. Vos sos laburo. Te levantás todos los días a la 6 de la mañna y laburás hasta las 11, cuando otros esquían en Aspen. Comételos crudos, porque tenés todo para eso. Tenés visión, tenés valores, tenés objetivos.

Olvidate del teleprompter. Hablanos con el corazón. Lo que más nos convence es que vos te convenzas. El resto se ordena solo, porque somos decenas, centenares de miles esperando tu llamado. Millones queremos que de un solo hachazo rompas el nudo gordiano.

La vida ya te puso antes frente a enormes desafíos. Los superaste a todos. Yo quiero un hijo así. Un padre así.  

Y encima caíste del lado correcto, con nosotros. Olvidate de los últimos 8 años. Olvidate del último año. Olvidate del mes pasado. Olvidate de ayer. El futuro está adelante. Es tuyo. Es nuestro.

Ya te conocemos. Ya te respetamos. Ya te admiramos. Ahora queremos que seas nuestro conductor. El que nos defiende de los tiburones que huelen sangre. El que nos incentiva a dar todo en la pelea. Que sepan que nuestros pobres, nuestros laburantes, nuestros viejos, nuestros estudiantes, los desvalidos, los enfermos, van a ser defendidos, caiga quien caiga, cueste lo que cueste.

Vamos Daniel.

Vamos, que vos podés.


Vamos Daniel, vamos. 
Sos nuestra esperanza. La de tus viejos, la de tus hermanos, la de tu hogar y la del mío. 

Vamos Daniel, ahora más que nunca.

Vos PODÉS.

Cómo preparar un asado



-Paula, pasame con Hugo por favor
...

-Línea 3, señor

-Gracias, Paula, cerrá la puerta por favor…hola, hola
Hugo, cómo estás tanto tiempo?

…yo bien, sí, cansado, filtrado, imagínate…y vos?

…claro, sí, salud bien?

…mmsí, sí claro

…bueh, mirá yo te llamaba porque este sábado en La Ñata organizamos un asado. …un asado,sí, grande, sí. Estamos invitando a todos…

…no, no, absolutamente bajo perfil, ningún periodista, ni prensa, nada, lo manejamos entre nosotros, es interno, es cerrado, pero quiero que vengan todos. No es para una foto ni para filtrarlo a los medios. Es para juntarnos. Asado ambulancia ponele, claro…

…ya invitamos a varios y les vamos avisando a qué otros estamos invitando, así todos saben con quién se van a encontrar, entendés? Muchos confirmaron, más que nada los que ya estaban, pero no me sirve. Los quiero a todos en La Ñata… a ver déjame ver la lista y te digo…

…estamos hablando con Plaini, con Caló, con Pignanelli, con Viviani, esos ya confirmaron y varios más, pero tengo también a Gerardo Martínez, al Momo, a Hugo…si Huguito Barrionuevo, a Julio Piumato, claro… pero también a Yasky, ojo, y a Micheli, en fin, todos. Los que no confirmaron están esperando que el resto confirmen y vos ahí sos central, negro. Me preguntan por vos. Quiero decirles que venís, eso ayuda. Del movimiento obrero los quiero a todos. Ustedes se juntaron el otro día, firmaron una carta de entendimiento, qué van a hacer: juntarse para hacerle paros a Macri? Jodeme…

…bueh, pero todo eso hablémoslo el domingo, entendés, de ahí para adelante. Pero juntos nosotros, de este lado. Después ordenamos para adentro, después vemos lo de quién va a Trabajo… Negro, sabés que te van a usar! Sabés que el 11 de diciembre están suspendiendo paritarias…qué vas a hacer? Un paro al gobierno con el que inauguraste el monumento a Perón?...

…qué dice Cristina??? Qué se yo qué dice Cristina? A quién le importa? Ni a vos ni a mí. Si a Máximo no le gusta se joden. Implotan… no, ahora sólo se habla conmigo o con Alberto Pérez, entendés? …

...te puedo dar un par de horas. Llamá al resto para chequear. Sí sí.Los vamos a cuidar, despreocupate, tenés mi palabra, nada de fotos, nada. Pero sabés que el tiempo me corre, no puedo darte 5 días, no los tengo. Tiene que ser esta tarde, mañana a más tardar…

…y te cuento que el domingo hay otro asado, es más político ponele y no tengo lugar para todos los del sábado, si quedan conformes. Pero me gustaría que pienses seriamente que si el sábado va bien, alguien tiene que contarle a los que invito el domingo que el sábado se reunieron ustedes y quieren jugar. Así que pensá seriamente en venir a la Ñata sábado y después domingo, que viene Urtubey, el portugués Das Neves, el gallego DeLaSota, Gioja, los Rodríguez Saa, Insfran, el Cabezón está invitado pero no confirmó, Alberto Fernández, es más político, entendés?... pero van a querer saber a qué juegan ustedes y mejor que contarle yo, le contás vos o Plaini…viste que ahora el chorizo es cancerígeno? bueh, este domingo te mato negro, jaja...

…no no, a Sergio no lo puedo llamar…está muy apretado, muy jugado, tiene presiones todo el tiempo y no lo quiero exponer…la idea es tenerlo al tanto y acercarlo más sobre el cierre. Sabe que le estamos tocando a los intendentes y los candidatos de él. No le puedo jugar tan frontal… pero hay lugar ahí para charlar…

...te gusta la idea? Claro, querido, así tenemos que ir. Pero todos entendés. Todos los que alguna vez estuvieron en el campo nacional y popular y que no militen abiertamente en la contra. Hasta Pino Solanas viene el domingo, cuchaste? Sí reíte…

…bueh, y los pibes como están?... están bien? Ok, deciles que vengan, los dos. Sí, los dos. Sergio nos avaló a Facundo, sabe que no puede hablar para Macri. Pero que vengan los dos, entendés?...

…bueno, Huguito, no te jodo más. Alberto te llama a la tarde. Hay lugar para todos, te mando un abrazo. Cuidate.

Click.

- Paula, llamalo al Momo por favor y avisale a Alberto que lo llame a Segovia de los troscos de metrodelegados.

-Señor, recién llegó mail de Sandra Russo, de 678. Dice que no lo va a votar.

-Uy, qué lástima.

lunes, 26 de octubre de 2015

Gran Jefe


Quedan 29 días hasta el próximo 22 de noviembre, fecha prevista para el próximo, medular, primer ballotage de la historia argentina.

Si restamos los usuales 2 dias de veda previos al 22, quedan 27. Si además consideramos que, a pesar de venir “ganando”, el resultado de ayer fue un uppercut directo al mentón nac&pop, es de Perogrullo decir que la situación es crítica y los tiempos apremian.

Pocos días para “diagnóstico” y no muchos más para “tratamiento”. Probemos.

La derrota del FPV fue, digámoslo, en toda la línea. Salvo bastiones muy tradicionales (Formosa, Santiago del Estero) el oficialismo perdió en los más variados distritos, en algunos casos con cifras sorprendentes. Podemos traer ejemplos, pero tuiter y los litros de tinta que se vertirán estos días indican que se perdió (no sólo en el sentido de perder el primer lugar, se perdieron muchos votos) en Quilmes (GBA), en Lincoln (PBA), en Chubut o en Jujuy. All across the board, dirían los periodistas deportivos.

De manera que flaco favor le hacemos al diagnóstico si lo convertimos en una caza de brujas.
Cuando la sociedad habla de esta manera, tan generalizada, tan homogénea, está pasando un mensaje central (que, distritalmente podrá o no venir anexado a otros mensajes de orden inferior): llegó al hastío con el actual modelo (este nacional, popular y kirchnerista) y está dispuesta a otra cosa. 
Agradece los beneficios, todos forman parte de su inventario (las asignaciones, los autos comprados con el ProCreAuto, los terrenos comprados con el ProCreAr, los vestiditos comprados con el Ahora12, todo agradece), incluso reconoce la validez de algunas formas (como trompearse con los fondos buitre) y algunos fondos (como seguir sosteniendo el mercado interno cuando el mundo se contrae), pero hasta acá, mi amor, llegamos. Fueron 12 hermosos años. Pasemos a la pantalla siguiente.

Esa voluntad de cambio ya mostró las uñas en 2009 y 2013, y por desdeñarla, se ha vuelto incontrastable. Ese deseo supera hoy, incluso, los enormes riesgos  implícitos que la figura de un tilingo como Macri pueda desnudar más adelante. Mayoritariamente saben que es un improvisado, que no da el piné y que prefigura señales débiles de que podría convertirse en un petit DeLaRúa. La sociedad no ignora esto y, sin embargo, le planta desafiante este benchmark gangoso e inconexo, pero que ha sabido entrar en frecuencia con la armónica de la sociedad: Cambio.

En este momento del discurso es cuando aparecen nuestros aguerridos compañeros ultra K a preguntarnos cómo pudo ocurrir esto, si nosotros dimos “todo”. Nos dicen que hay un proyecto, que hay dos modelos de país, que vivimos una lucha de clases mimetizada en los códigos de la posmodernidad, honorables argumentos que conviene tener bien claritos, pero que al señor en chancletas que ayer me vendió un choripán a la vera de un chulengo en JC Paz, no le modifican un ápice su realidad.

Si nosotros somos los inteligentes, los politizados, los referentes, pues somos también los responsables intelectuales de encontrar el signficado adecuado para llenar ese significante todavía incógnito que se nos demanda. Y fundamentalmente, para que nuestro “proyecto” ilumine el recorrido de la siguiente década de nuestra sociedad, en lo posible con luces altas encendidas, que nos evite pozos, grietas y salteadores de caminos.

La sociedad demanda “Cambio” y, por extensión, un líder que lo conduzca. En eso estamos los argentinos en estas semanas.

Aprovechamos aquí para hacernos una pregunta capciosa: el Cambio buscado será, necesariamente, el que los líderes de las otras facciones representan? Sagazmente, se arrogan el cambio, lo subsumen a su persona, a su partido, pero estos son los artificios del lobo que se cubre con una piel de cordero ("Macri es Menem sin yevolución productiva ni salariazo", dijimos en tuiter)

Y otra pregunta, no menos capciosa: Scioli ha demostrado que es el líder que puede conducirnos con éxito en ese Cambio?

Perversamente, no responderemos la pregunta.

Corrida la densa hojarasca de las instituciones, del marketing político, de nuestra occidentalidad, cuando elegimos a nuestro líder estamos eligiendo a nuestro cacique. Al jefe de nuestra tribu. A nuestro Macho Alfa lo queremos igual que nosotros, pero mejor que nosotros. Porque así somos de exigentes (y gregarios), los homo sapiens.

Detrás de todos los méritos que tienen la constancia, la templanza y el sentido de la oportunidad, íntimamente sabemos que no alcanzan: queremos audacia y coraje. Coraje para patear el escritorio de los poderosos. Audacia para apostar a una solución innovadora. Y ambos para dejarle claro a la antecesora y al resto de la tribu que se llevará puesto todo, incluso a ella.

Ella, la madrecita, le haría un enorme favor a todo proceso si, en un altar secreto de la Reserva, cortando el cordón umbilical, lo empoderará final y definitivamente.


Ahí, en el terreno de lo subliminal, de lo tácito, de lo inferido, es donde Daniel Osvaldo Scioli mantiene todavía una deuda con su tribu (que, naturalmente, es la argentina, no la peronista). El discurso de reconocimiento del ballotage, anoche, firme, decidido, pareció prefigurar levemente ese trayecto.

Si nos piden opinión, creemos que Scioli tiene paño para vencer, en su liderazgo ejemplar, al liderazgo carismático de Macri. Pero él mismo debe reconocerse. 

Paradójicamente, al hombre que se ataba la mano al volante de la lancha para conducirla firmemente, le pedimos que legitime su liderazgo y que nos muestre el camino del cambio. 

Liderazgo y cambio. 

27 días.

La manada es insaciable. 


inspiration by Graciela

domingo, 25 de octubre de 2015

Trenzas


Salgán al piano
De Lío en la guitarra
al lado Leopoldo Federico
y canta El Feo Rivero
atrás Laurenz, Ferro y Francini
...mejor que Holanda del 74

Trenzas,

seda dulce de tus trenzas,
luna en sombra de tu piel
y de tu ausencia.
Trenzas que me ataron en el yugo de tu amor,
yugo casi de blando de tu risa de tu voz...
Fina
caridad de mi rutina,
me encontré tu corazón
en una esquina...
Trenzas de color de mate amargo
que endulzaron mi letargo gris.

¿Adónde fue tu amor de flor silvestre?
¿Adónde, adónde fue después de amarte?
Tal vez mi corazón tenía que perderte
y así mi soledad se agranda por buscarte.
¡Y estoy llorando así
cansado de llorar,
trenzado a tu vivir
con trenzas de ansiedad... sin ti!
¡Por qué tendré que amar
y al fin partir!

Pena,
vieja angustia de mi pena,
frase trunca de tu voz
que me encadena...
Pena que me llena de palabras sin rencor,
llama que te llama con la llama del amor.
Trenzas,
seda dulce de tus trenzas,
luna en sombra de tu piel
y de tu ausencia,
trenzas,
nudo atroz de cuero crudo
que me ataron a tu mudo adiós...

sábado, 24 de octubre de 2015

Atrofias y Prevalencias



La atrofia de los mecanismos de comando de los sistemas económicos nacionales es la prevalencia de estructuras de decisión transnacionales
Celso Furtado

En algún momento de los últimos meses ocurrió un hecho mudo, pero que grita la tendencia real del capitalismo que modela nuestro planeta. El año pasado el Credit Suisse había calculado que el 1 por ciento más rico del planeta poseía el 48% de la riqueza producida en el planeta. El Reporte de Riqueza Global en su versión 2015, emitido por el Credit Suisse hace pocos días, indica que ese 1% es ahora propietario del 50.4% de la riqueza global. Es decir, se ha perforado la simbólica cifra de la mitad de la riqueza mundial. La ONG británica Oxfam lo había predicho en enero, sin que eso signifique celebración alguna.

Es obvio que este proceso de concentración en menos y menos manos tiene efectos sobre la estabilidad social en los países y amenaza la seguridad global. La pobreza es ahora un poco más difícil de combatir, amenaza la inclusión política y genera efectos innegables sobre la corrupción: es cada vez más difícil mantenerse cristalino cuando las corporaciones chocan con los intereses de los gobernantes y sus pueblos.

Un estudio reciente en India muestra que la mitad de sus nuevos milmillonarios ha construido su fortuna sobre la base de "renta gorda", lo que en criollo significa subsidiados por acciones y muchas veces omisiones de los gobiernos (permisos para construir en suelo público o el control no legalizado de medios de comunicación).

El capitalismo, así, se va corriendo de manera ominosa desde su eje competitivo e innovador a tu eje monopólico y corporativista.

Nuestra predicción es que estas secuencias, a lo largo de la historia, suelen terminar peor de lo que empezaron, con sangre, con regímenes totalitarios o imperios del terror. Cuando ocurra, no será precisamente una película de Scorcese

martes, 13 de octubre de 2015

Poder



(...) El viernes Kirchner puso a parir al Ministro de Finanzas de Francia, Francis Mer. El mismo día derogó el decreto de Fernando De La Rua que absolutizaba el principio de territorialidad e impedía a los jueces tramitar las solicitudes de extradición de terceros países contra los militares imputados por los delitos de genocidio y terrorismo en Europa. El mismo Mer lo congratuló por ello.

Pero la esgrima con el duro empresario siderúrgico francés había comenzado durante una reunión del ministro de planificación Julio DeVido con la Federación Agraria. Los ruralistas de la pampa gringa, preocupados por sus costos energéticos le preguntaron qué pasaría cuando Mer pidiera un aumento en las tarifas de las empresas francesas, entre ellas la Transportadora de Gas de Norte y Edenor. "Si ese es su tema, mejor que no venga" respondió DeVido al pasar. El diálogo trascendió a la prensa y la embajada francesa explicó que la agenda de Mer incluía también otros temas. Mer comenzó su diálogo con Kirchner en forma elíptica, aludiendo a la incertidumbre y la necesidad de reglas claras que favorecieran la inversión. Como las respuestas no eran menos elípticas, pasó a la ofensiva.

-Tenemos que encontrarle solución al problema de las empresas francesas, porque los mercados tienen memoria -dijo

-Los pueblos también tienen memoria -le respondió Kirchner

El presidente agregó que nadie puede pedirle a la Argentina que vuelva a pecar y regrese al infierno del que acaba de alejarse apenas un paso. "Le estamos debiendo plata a todo le mundo. Veamos cuánto nos ayudan ustedes a superar esa situación. Y entonces discutimos estas cosas. Hoy no estamos en condiciones". 

Mer no se amilanó y con tono cómplice insistió:
-Voy a ser más concreto. Si lo que usted necesita es ganar tiempo, para afirmar su popularidad, dígame cuánto tengo que esperar.

-No lo necesito, tengo más popularidad que cualquier presidente anterior. Hay que hacer lo que corresponda. Cuando me pinchan reacciono mal y usted lo intentó. Le aconsejo que no lo repita porque entonces no podríamos ser amigos. Y yo quiero ser su amigo -dijo Kirchner

Cuando la tensión se hacía difícil de soportar y Mer golpeteaba con sus dedos sobre la mesa, Kirchner cerró el diálogo con un giro imprevisto. "Yo sigo las enseñanzas de un maestro político. Cuando la Unión Europea reclamó un pacto de estabilidad y la supresión del déficit fiscal, Jacques Chirac respondió que se esmeraría por la estabilidad pero que no postergaría el crecimiento, y le pidió a Europa que aceptara un déficit fiscal del 3.5% del PBI. Usted viene como Ministro de Francia pero actúa como lobbysta de las empresas. Yo sé qué intereses representa usted y no se los cuestiono, pero yo represento a 35 millones de argentinos y no puedo aceptar más desigualdades sociales. Por eso voy a hacer como Chirac. Vaya tranquilo, que voy a gobernar para mi pueblo como gobierna Chirac para los franceses".

Los legisladores franceses de distintos partidos que integraban la delegación rieron, ante la expresión azorada de Mer.(...)

Fragmento de "Conflictos y Armonías",
Horacio Verbitsky,
Página/12,
un domingo 27 de julio de 2003.

También aquí

lunes, 12 de octubre de 2015

Piloto de Altamar



En la entrada anterior trajimos a la mesa un debate académico que creemos que tiene significación y probables efectos sobre nuestro futuro.

Hacemos votos para que los tenga, porque está claro que en la nueva (e inédita) pantalla que se jugará a partir de 2016, considerando la virulenta dinámica política en nuestra tierra, las lecciones que nos dejan cada día los intentos de un partido popular por congraciarse con el poder financiero en Brasil y el fructífero paréntesis que impone la visible pugna de liderazgo entre las facciones de nuestro poder económico concentrado, abre la posibilidad de pensar y diseñar un modelo de país que probablemente no haya ocurrido desde los años de la (nefasta, dirán algunos) Organización Nacional allá por 1880.

Los 12 años de kirchnerismo son, entre otras cosas, una batalla cultural ganada. Las pruebas son contundentes, por ejemplo en las maniobras electoralistas desesperadas de los representantes del conservadorismo local para convocar el “voto útil”: hay que garantizar la continuidad de los derechos sociales incorporados en la última década y confirmarlos con un monumento a Perón.

Los académicos observan, decíamos en la entrada anterior, parámetros cuantitativos razonablemente elegidos, “pertinentes y relevantes” dicen en su jerga. Entre ellos cuenta la calidad educativa (se sabe que este blog desconfía consuetudinariamente de los cuantificadores impuestos por orgas internacionales, por caso el PISA), la productividad, la cohesión social, etc.

Nosotros, sin desestimar las agudas conclusiones de los sabios, creemos que los países avanzan a un estadío superior sólo cuando amplias mayorías de su sociedad están sintonizadas en la misma armónica, cuando sectores populares ampliamente mayoritarios bailan al ritmo de la misma música. Es esa gran mayoría, y no hablamos de los resultados de una elección sino de algo más ambicioso, la que puede aspirar a imponer una visión que cristalice en objetivos soberanos, comunes y deseables y que esa visión, ese rumbo sea obligatorio para las minorías, incluso aquellas que fungieron de mayoría durante largos y penosos años.

Eso es lo que sintetizamos, audazmente, de las conclusiones de los académicos. Creemos que los ejemplos de Corea, Finlandia o Japón nos avalan: sociedades cohesionadas (sea voluntaria o exógenamente) con una autoestima nacional alta y la firme decisión de trascender.

En nuestro caso estos 12 años, por decirlo de una manera estilizada, pusieron el foco en los sectores más olvidados de la sociedad, trajeron a la luz a los invisibilizados del neoliberalismo. Hablamos del 40% más pobre de nuestra sociedad. Pero declaramos acá y ahora: la hegemonía de la que hablamos no se construye con la mitad “inferior”. Es más ambiciosa que eso y requiere de los sectores medios, dando por descontando que la arista superior de nuestra pirámide sigue creyendo que le sienta mejor el rol dual de ser, a un tiempo, yugo inflexible de sus compatriotas y cortesana del poder global.

En esos sectores medios se asientan dueños de pymes, autónomos exitosos, ejecutivos de empresas medianas y grandes, creadores de valor de las más diversas maneras, pero no sólo ellos, también sus familias, sus relaciones de clase, sus asistentes cercanos, su secretaria, la familia de su secretaria, en fin, podemos seguir.

No es un desafío sencillo. Hablamos de gentes que han sido sometidas a 30 años de un discurso único, deliberadamente alienante y derrotista, cuidadosa y perversamente diseñado, y que han visto como una profecía se convierte en realidad con vivencias de hiperinflación, saqueos, piqueteros contra caballerías, confiscaciones, etc.

Gentes, también debemos decir, de las que nos cuesta entender cómo pueden vivir en la dualidad de crear y ver alrededor como otros crean valor todo el tiempo, fomentan innovación, creatividad, soluciones únicas y atadas con alambre, pero que duran siglos, en un ecosistema en el que los negocios son hostiles, volátiles, casi fantasmales, donde el derecho de propiedad está todo el día bajo amenaza, y todo eso pensando que no tenemos futuro, que el Pasaporte europeo es una bendición, que lo deseable se llama Miami.

Gentes que todo el tiempo son amaestradas en el dudoso arte de discriminar al pobre, al negro, al cabeza, de desestimar su patrón social, a las que cada día el poder les inocula una gotita más de odio de clase.

Obsta decir que la descripción es estilizada y genérica, un intento jauretchiano y audaz de un relato de clase, pero a instancias de sus padres, los hijos de estas familias son los que se suben a un micro, marchas centenares de kilómetros y emprenden acciones solidarias con otros argentinos que viven en una tribu del Chaco o una villa miseria en Junín de los Andes. O resuelven dedicar largas jornadas a juntar y ordenar donaciones en una capillita cuando la naturaleza se ensaña con sus compatriotas. La solidaridad, la nobleza y el empuje rezuman, hasta que se enciende el televisor.

Ese es el desafío de la próxima etapa si nos queremos tomar en serio atravesar con éxito el Mar de los Sargazos.

Es un desafío inédito en la historia humana. En todos los otros casos, los procesos de emblocamiento hegemónico de las sociedades fueron hechos desde arriba hacia abajo, y en la mayoría de los casos instrumentados a punta de fusil o bajo amenaza de inanición. Elites que convencieron, pero después del primer tiro. Sabemos que no es el camino.

Nuestro camino, el del peronismo, es ir de abajo hacia arriba, pacíficamente, por vía de la persuasión, tendiéndole un sólido puente a aquellos a quienes el mismo peronismo creó y luego liberó a su albedrío, para que vean en los sectores sociales que los sostienen a hermanos, a compatriotas, a compañeros en el mismo barco.

Si este proceso de cohesión tiene éxito, el disciplinamiento de potenciales sectores rebeldes, los dueños históricos, es automático. Nada más insobornable que una sociedad convencida.


Tendernos la mano es lo que sigue.

domingo, 11 de octubre de 2015

La Trampa de los Sargazos



Alguien miró el fenómeno y le puso nombre: la “Trampa de los Países de Ingreso Medio”. Está bien un nombre así, que intimide. Desde la Segunda Guerra para acá las estadísticas nacionales han mejorado mucho. Se tienen hoy bases de datos que responden a preguntas bastante complejas y para los economistas esas bases son una especie de paraíso en el que juegan a probar sus hipótesis y eligiendo las series apropiadas.

Existe un conjunto de países que no reúne las condiciones de los países avanzados para incluirse en el lo que llamamos desarrollados, al tiempo que sus condiciones estructurales y sociales también los separan de países pobres, sea estructural o coyunturalmente. Se utiliza un indicador bastante básico como el PBI per capita (que, por ejemplo, no da cuenta de la distribución del ingreso al interior del país: Emiratos Arabes tiene un muy alto ingreso per capita). A los países en los que aquel valor se ubica en la brecha de 9 a 22 mil dólares anuales, se los llama países de ingreso medio. Por supuesto que estamos, aquí y ahora, escribiendo esta nota porque Argentina, con unos 15mil dólares PBI per capita es uno de ellos. También lo son muchos delos otros “grandes” latinoamericanos: Chile, Brasil, México, Uruguay, etc.

Avancemos: los académicos han observado, desde el final de la Segunda Guerra a la fecha, unos cuántos países que se ubicaron en este estrato, pero lo que más llamó la atención fue el hecho de que pocos países pudieron, en el tiempo, perforar el techo de este grupo de países “clase media” para convertirse en países de renta alta. Las cuentas dicen que aproximadamente unos 110 países estuvieron en el estrato medio y se contabilizaron sólo 13 concretando el pasaje exitoso a la clase alta.

Frente a tan baja tasa de éxito, los teóricos hablan de una suerte de conjuro que se manifiesta contra esta clase de países, al que denominan la Trampa del Ingreso Medio y es materia de estudio en pequeños círculos heterodoxos que se dedican a la economía del desarrollo hace una década. El más visible, no por la calidad de sus estudios sino por ser un activo referente político dentro de la Concertación chilena es Alejandro Foxley. Desde ya recomendamos su trabajo, sin dejar de anticipar nuestra opinión: la posición política de Foxley en Chile convierte al texto en una oda a la esperanza para el país trasandino, y todos sabemos que la realidad es mucho más dura.

A los autores de este blog, ilusos que soñamos en llegar a la luna en un Torino, también nos atrapa el asunto, seguramente porque estos últimos doce años de kirchnerismo en el país tuvieron un efecto muy “Pirámide de Maslow” en nuestras meditaciones y porque en esta etapa de balance frente al cambio de gobierno, tenemos el tiempo y la motivación para pensar el futuro y pensarnos “out of the box”.

En primer lugar identifiquemos a los dichosos 13 países que “lo lograron”: Japón (actualmente 42.000 dólares de PBI per capita según la base de datos del Banco Mundial), Corea del Sur (27.090), Finlandia (48.910), España (29.940), Portugal (21.320), Irlanda (44.660), Singapur (55.150), Taiwan (sin datos), Hong Kong (40.320), Eslovaquia (17.810), República Checa (18.970), Eslovenia (23.220) y Grecia (22.090).

De sólo observar esa lista, el debate que se preveía económico, se sale del camino y entra de lleno a campo traviesa: es un debate eminentemente político. De sólo observar la lista anterior vemos como es pertinente pensar que varios de los 13 países no hicieron su ingreso al selecto club por condiciones estrictamente endógenas, por mérito propio diríamos, sino como resultado de una coyuntura geopolítica obvia. Tomemos Corea del Sur: además de la significativa dictadura del General Park, el país está enclavado en una de las fronteras calientes de la Guerra Fría. Sería razonable que si el capitalismo tiene que mostrarse triunfante, este pequeño país casi sin recursos naturales específicos, se convierta en una perla de la economía de mercado.

Razonamientos de orden similar quizás merecen los ejemplos de la “periferia” europea: Portugal, España, Irlanda y Grecia. Es impostergable observar como estos “alumnos ejemplares” vienen sufriendo un castigo económico enorme en el último lustro. Nos lleva a la inevitable pregunta de cuáles eran, en los años de éxito, los drivers genuinos de aumento de productividad, competitividad y desarrollo en esos países. El manto de duda no tarda en cubrirlo todo.

También surgen preguntas sobre los tres ex miembros del Pacto de Varsovia: República Checa, Eslovaquia y Eslovenia. Están tan cerca del umbral piso de países de alta renta, y hace tan poco tiempo, que nos parece sugerible dejar pasar algunos años de su afianzamiento para no encontrarnos justificando un festejo precoz.

Seguir en esta línea de análisis hace que tiemblen la mayoría de los países de esa lista. Como toda taxonomía, su grado de arbitrariedad nunca es menor.

El análisis de Foxley, asumimos que otros autores se mueven sobre las mismas líneas de razonamiento aunque variando el énfasis, define lo que denomina “vectores críticos” del desarrollo. Siendo este un proceso multidimensional, el autor ha identificado lo que define como factores comunes relevantes al cambio de pantalla. Abrimos al debate:
  • El dinamismo de las exportaciones, así como la diversificación de los productos y destinos: se pone al comercio exterior como un importante driver del desarrollo, que no sólo hace foco cuantitativo en los montos y volúmenes, sino en el qué, en el cómo, en el dónde y en el cuándo. Para países como Chile, en el que el cobre se lleva una cuota mayoritaria, el autor lo considera una restricción. La nuestra o la brasileña serían, bajo este abordaje, canastas exportadoras más sanas.
  • La existencia de redes de protección social: enunciado de esta curiosa manera, el autor caracteriza este factor mediante el índice de igualdad de Gini. Nos está diciendo que valora muy positivamente una estructura social homogénea y cohesionada como aval del desarrollo. Desde este aburrido y reiterativo blog no necesitamos profundizar nuestra opinión sobre este punto.
  • El mercado laboral y la formación de capital humano: en su adn más ortodoxo Foxley le apunta a la necesidad de flexibilizar el contrato entre capital y trabajo, pero también habla de la demanda de una formación educativa robusta y compleja como sine qua non del desarrollo.
  • La productividad y competitividad basal de la economía: en el fondo este factor redunda, si se mide a los países por pbi per capita quedan subsumidas tanto la productividad general de una economía como su competitividad. Asumimos que la convergencia de los factores anteriores en una economía tienen por efecto una mejora en la productividad.

En el deporte de armar rankings, Foxley presenta la lista de países que él prevé como potencial para afrontar el desafío de realizar este pasaje con éxito. Los postulantes son Brasil, Chile, Colombia, México, Perú, Uruguay, Bulgaria, Estonia, Hungría, Letonia, Lituania, Polonia, Rumania, Malasia, Tailandia y Argentina (al que etiqueta como histórico fallido de este club).


Creemos que este, y no los tanques en las villas miseria, y no el hipotético millón de créditos hipotecarios equivalente a casi tres veces el volumen de reservas del BCRA, este decíamos es el debate pertinente. Este es el verdadero desafío. Y es inmediato. Preparar nuestro barco para atravesar este Mar de los Sargazos del subdesarrollo.