martes, 28 de abril de 2009

Si yo fuera Miguel Bein, no andaría tirando un carro





Si yo fuera Miguel Bein, y TN me llamara para hablar sobre el nuevo “endeudamiento” de Argentina con el FMI, antes que nada, pediría sutilmente que se modificara el título de la conversación. Porque palabras como “endeudarse”, “endeudamiento”, etc., aluden a una serie de significados que no se condicen con lo que pasa actualmente en la relación entre el Fondo y la Argentina.

Después de una reunión entre los países miembros del FMI (Argentina lo es), se decidió conjuntamente capitalizar al Fondo. Es decir, aportar, de acuerdo a lo pautado, divisas para que el Fondo cuente con un capital adicional, que le permita cumplir mejor con sus funciones (“socorrer” países en problemas, qué se le va a hacer, los papeles dicen eso). A partir de esa capitalización, el FMI distribuye su nuevo capital, no a través de líneas especiales de crédito en este caso, sino con otro modo de operación.

Suponga que usted es cliente de un Banco, que un día alguien de ese banco lo llama por teléfono para avisarle que la entidad resolvió ampliar el descubierto de su cuenta corriente en 5.000 pesos. El endeudamiento no se concreta, hasta tanto usted no firme un cheque contra ese descubierto.

Bueno, es más o menos eso lo que está pasando con estos 2.500 millones de dólares que el FMI le prestaría a la Argentina. Le prestaría, siempre y cuando la Argentina decida usarlo. Pero yo no soy Miguel Bein, y a decir verdad el hombre explicó la cosa bastante mejor de lo que yo hubiese podido.

Aunque (es una lástima), para los códigos que TN maneja en la comunicación con sus televidentes, el título vale más que ninguna otra cosa, y por mucha diferencia.

6 comentarios:

Eva Row dijo...

¿Por qué no se podrá hacer una Ley de Medios donde se regulen impedimentos a la manipulación? una forma de ello es la titulación. Otra es la ausencia de cobertura de información en eventos de interés público como por ejemplo ayer que vino Evo Morales a firmar un acuerdo con Lugo gracias a la intervención de la Argentina. Fue un día histórico. Pero los futuros historiadores se van a encontrar con que los diarios de la época no informaron, entonces se van a dar cuenta de la arbitrariedad de Clarín y de todos los que siguen su línea por emulación en la disputa del mercado.

Mariano dijo...

Es muy cierto Eva lo de la manipulación. A mí me molesta muy poco que hagan política. Me parece totalmente legítimo. Pero es muy repudiable que lo nieguen, que se escuden en figuras ficticias como la objetividad, o se parapeten tras la libertad de prensa, bastardeando a la libertad de expresión.
Muchas gracias por pasar y comentar. Un saludo

Ana C. dijo...

Lo que me costó a mí fue caer con el título de este post.

Andrés el Viejo dijo...

Lamentablemente, no hay ningún mecanismo posible para evitar ese recurso permanente de poner en el título algo distinto y hasta contradictorio con la información. Esto se hace porque se ha estudiado que los lectores leen el título, la bajada, el avance, los destacados y los epígrafes en ese orden. Muy pocos entran al texto de la nota. Así que lo que queda es el título. En la televisión, que se mira más distraídamente, el subtitulado puede llegar directamente a reemplazar lo que se dice.

Raúl C. dijo...

¡Mucha suerte con lo cartone!

Mariano dijo...

Ana: la idea era resaltar que por algo Miguel Bein es quien es y yo soy quien soy.
Realmente un gusto que pase por acá. Esperamos seguir contándola como lectora y comentarista.
Saludos.

Raúl: muchas gracias. Saludos