miércoles, 15 de mayo de 2013

Alicia en Blu-Land


Había una vez un país muy lejano y muy capitalista que se llamaba Blu-land, en el que vivía un hada que se llamaba La Mano Invisible. La Mano Invisible era bondadosa con los buenos y mala con los malos y, ante todo, era eficiente. Cuando algo en aquel país era difícil de conseguir, cuando escaseaba, ella llegaba pronta para aumentar su precio. Y al revés, cuando algo abundaba, inexorablemente La Mano Invisible llevaba su precio a un nuevo punto de equilibrio en el que todas las fuerzas de la oferta y demanda volvían a equilibrarse

Después te explico qué es oferta y demanda, nene, después.

La Mano Invisible era invisible, entonces hacía esto de una manera en la que nadie se daba cuenta. Y entonces todos pensaban que Blu-Land era el mejor Reino del mundo. Y que vivir allí era una bendición.

Los habitantes de Blu-Land, que además de tener todos los dientes muy blancos y brillantes, eran todos ABC1, vivían felices junto a los gnomos, quienes cosechaban el alimento que consistía en hojas de rúcula, grandes (de 100), verdes y muy sabrosas.

Hasta que un día frío y gris llegó a Blu-Land un ogro muy malo y muy feo que se llamaba Polémico. Tenía unos bigotes con un fuerte olor a azufre y se tiraba pedos con los que llenaba unos extraños globos que decían “Clarín Miente”. Eso también te lo explico después…

Polémico era muuuuuuy malo. Y no dudaba en robarle los caramelos a los niños y tirarle piedras a los gatos. Pero las peores maldades del ogro no ocurrían cuando tenía un garrote en la mano. Sus peores fechorías ocurrían cuando Polémico empuñaba el teléfono.

Polémico, feo sucio y malo, llamaba a los duendes mágicos y les decía que tenían que dejar de vender rúcula. Y luego los amenazaba diciéndoles que si él se enteraba de que iban a seguir vendiendo, les iba a mandar a los afip-erros mordedores, comandados por el apestoso H-garay.


Entonces, intimidados, los duendes mágicos cortaban todas las ventas y la rúcula desaparecía. La gente de Blu-Land comía rúcula, de manera que era normal que ante esta escasez, hadas, duendes y gnomos se pusieran de la peluca y dejaran mensajes destituyentes en el programa del hobbit Nelson Castro.




Lo más sorprendente de Blu-Land era que, cuando Polémico les pegaba tres o cuatro golpes de celular en la cabeza a los duendes mágicos y estos, doloridos por los chichones, dejaban de vender rúcula, esta automáticamente empezaba a escasear y ahí llegaba la rapidísima Mano Invisible que venía a solucionar todos los problemas.

La Mano Invisible razonaba impecablemente: “si, por culpa del ogro, hay gran escasez de rúcula, no tengo más remedio que hacer que su precio crezca mucho, que se infle, que estalle…”

Y entonces la mano invisible soplaba y soplaba, pero el precio no subía.



El precio se mantenía, uf!



O, peor, el precio bajaba (y parece que va a seguir bajando).


La Mano Invisible estaba azorada y no sabía que estaba pasando, nunca le había pasado algo igual. Desde la llegada de Polémico y su temible Teléfono, la rúcula había dejado de hacerle caso.

Algunos se preguntaban si era culpa del blanqueo. Pero el blanqueo todavía no se había promulgado (mañana te explico que significa promulgar).
Otros se preguntaban por qué necesitamos el blanqueo si en Blu-Land somos blancos, rubios y ABC1
Y otros se preguntaban qué significa "vamos por todo".

Y de narváez colorado, este cuentito se ha terminado.

No, nene, Fiona no viene.


Bloguear es brindar servicio.
Bloguear es ayudar a los padres cuyos hijos presentan dificultades para conciliar el sueño.
Bloguear es ayudar a pensar, a debatir, a consensuar y a ponernos de acuerdo en esas tres o cuatro cosas que necesitamos para que este país salga adelante, según me explicó mi amigo Rinconete. Entre ellas el precio del dólar.

De nada.


3 comentarios:

gem dijo...

genial !

guilleO dijo...

Grande Contradicto, se ve que cambió el aire y está para jugar 180'. Lo sigo y si quiere le tiro una pared.
Abrazo

Marcelo dijo...

Pero cualquiera que lea esto va a pensar que las cosas están bien gracias a Polémico, y a mi me parece que todo está como el orto... Me lo explicas mañana?