Contenido. 5 dedos, 27 huesos, 29 articulaciones, unos 123 ligamentos, 35 músculos para mover el conjunto: 17 de ellos en la mano y 18 en el antebrazo, 48 nervios: 3 de ellos principales, 24 sensoriales y 21 musculares, 30 arterias. Todo funcional. Todo distinto. Todo imprescindible.
Articulación.Cuatro de sus dedos tienen la habilidad del movimiento prensil. El quinto, en un lateral, está controlado por un conjunto de órganos prácticamente independiente de los restantes: es traccionado por 9 músculos que a su vez son controlados por los 3 nervios principales y que le permiten la libertad de 6 movimientos diferentes, además del prensil, común a los otros cuatro. Pueden rotar sobre su eje longitudinal 90 grados hasta quedar enfrentado a los otros cuatro. Esta es una gran característica, pero no es lo que la diferencia del resto de las especies, ya que otros primates también la tienen. La verdadera diferencia se encuentra en los otros dos dedos en el extremo opuesto, el meñique y el anular, que también pueden rotar en la palma para encontrarse con el pulgar en un movimiento denominado “oposición ulnar”. Esto se debe a una extraordinaria capacidad de las articulaciones que los forman, para dar lugar a una amplísima variedad de movimientos que, como en ninguna otra especie, incluyen una notable capacidad para el agarre recto (un raqueta de tenis), el agarre oblicuo (una lapicera) y el movimiento de ajuste circular (ese que ejercemos, por ejemplo, cuando queremos girar una perilla o generar una torsión en alguna pieza). Sólo un homo sapiens puede lograrlo.
Complejidad.Una cuarta parte de la corteza cerebral que contiene las habilidades motoras de todo el cuerpo está dedicado exclusivamente al movimiento de la mano, lo que da la pauta de su complejidad. Le va a permitir habilidades motoras de las gruesas, pero también las habilidades finas, que se refieren a aquellas donde no sólo intervienen los movimientos básicos sino también la sensibilidad de los dedos. Por ejemplo, esa tensión exacta con la que los dedos toman una pieza frágil, con firmeza, pero sin llegar a lastimarla. Como aquella fatídica escena del replicante Batty, como lágrima en la lluvia, tomando cuidadosamente a la paloma mientras un clavo atraviesa sus falanges, tiempo de morir.
Sensibilidad. En las yemas se agrupan las más ricas densidades de terminales nerviosas que, en conjunto con una piel sin vellosidad y firme pero sensible, dan lugar a la más importante expresión del sentido del tacto. Yemas que pueden diferenciar texturas de muchos grados diferentes, apreciar diferencias de temperaturas casi inapreciables para otras regiones de la epidermis, percibir el contacto de las mínimas excitaciones tales como pelusas, rugosidades micrométricas (como la identificación de billetes para ciegos) o sensibilidad a excitaciones mecánicas ínfimas (como la que maximiza el ladrón de cajas fuertes).
Sentido.Una mano es una maravillosa obra de la naturaleza que, creo, nunca será igualada por ningún engendro artificial. Sus capacidades, acariciar, comunicar, instrumentar alguna destreza, sea música o pintura, transmitir un sentimiento, nunca van a dejar de sorprenderme.
Nunca podré dejar de admirar las manos que levantan una bandera de todos. Las que se unen con las de otros para defenderse del embate de las bestias que arteramente golpean con otras manos. Las que buscan para abrazar. Las que secan lágrimas. Las que construyen y moldean. Las que tejen. Las que escriben. Las que aplauden. Las que amparan. Las que dicen cuando danzan. Las que hablan por boca de mudos y las que leen por ojos de ciegos. Las que pueden servir para matar al que nos oprime.
Nunca podré dejar de admirar las manos de mi hija, las de mi mujer. Nunca podré dejar de admirar mis propias manos.
Nunca podré dejar de admirar las manos del David. Pero mucho menos podré dejar de admirar a las manos que hicieron a las manos del David. Soy un hombre afortunado.
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La política no es la mente. La política no es el corazón. La política no es la boca ni son los ojos.
La política es la mano, con sus cinco dedos, cinco características, factor fundamental de la acción.
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6 comentarios:
Buenas
Excelente,yo tambien tengo algo con mirar las manos de las personas.
Estrechar las manos es el primer contacto con alguien.
Tomarse de las manos es el primer contacto entre un hombre y una mujer.
El cerebro es la idea,pero los hechos concretos son las manos.
Estuve tentado de comentar de las manos del Pato,pero mejor no.
Saludos
Contradicto, esto es una maravilla. Me dejó sin palabras, sin embargo mis dedos están aquí, inspirados por su escritura y comentándola. Tiene toda la razón.
Un post para Rached por favor
http://www2.criticadigital.com/impresa/index.php?secc=nota&nid=33434
http://www.infobae.com/politica/392414-101094-0-El-senador-Rached-aclar%F3-que-nadie-influy%F3-su-voto
Usté siempre me sorprende. Qué lindo post sobre las manos. Yo tenia una amiga que se entretenía en mirar orejas...Indudablemente, son las manos las que nos hacen lo que somos. Me lo imprimo para charlarlo en la escuela.
Y el parrafo sobre el sentido...impecable. Esas son las manos que yo quiero.
Muy lindo post.
Un justo reconocimiento a las manos.
Gracias por pasar. A todos.
Quilmeño, sensibilidad es lo que hace humana a la política, la hace mejor y la conecta con nuestros mejores sentimientos. Guante de algodón con los más débiles. Y apretarle firmemente los huevos a los que se victimizan cuando les toca garpar la cuenta del fiestón que organizaron. Pero la política también necesita dosis adecuadas de los otros cuatro factores.
Para hablar del Pato, el blog de Artemio.
Grace, guarda con las cosas que anda divulgando en la escuela. Despué tenemo la jubentú que tenemo: tan todo fumando paco y tomando cerbesa en la esquina.
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