jueves, 4 de junio de 2009

Cartón for espor II: Grandes Secciones y Transporte Terrestre


Seguimos hurgando entre las bolsas que nos dejó el INDEC y encontramos la tablita que mostramos acá. Agrupadas en lo que se conoce como Grandes Secciones del Sistema Armonizado y ordenaditas por monto, mostramos las exportaciones argentinas 2008, comparadas con las de 2007.



Empezamos a ver algunas cositas interesantes: el rubro líder es el denominado “Material de Transporte Terrestre” y se trata mayoritariamente de autos. Buenísimo. Productos a consumidor final, con muy alto valor agregado, alta generación de ocupación y reforzando una compleja cadena de valor. Una industria que vale la pena cuidar y nutrir, sin sucumbir al permanente llanto prebendario que suelen entonar sus representantes (Ratazzi lagrimista estrella). Pero ahí están, nada menos que 30% de las MOI y 9% de las exportaciones argentinas (!!!) No soslayamos, no somos tan oficialistas, el desbalance que ocurre por el lado de las importaciones.



Pero entendemos el contexto: la reconstrucción de la industria automotriz desde el 2002 para acá se dio sobre la base de un sistema de comercio administrado que buscó favorecer la instalación de terminales y la asignación de nuevos modelos a las plantas en nuestro país. Si usté se pregunta por qué, me veo en la obligación de decirle que, en la fase tecnológica actual, no hay industria automotriz sin terminales (de la misma manera que no hay fiestas sin mujeres). No son grandes generadoras de puestos de trabajo, son sólo grandes armadurías, el resto de la industria las considera un dolor de baja espalda, pero sin ellas el sector va directo al estancamiento. Pero en ese juego de seducción hay que competir con Brasil, que fabrica 5 veces más autos (tendrá una industria desarrollada 5 veces más?).



Eso se logra a costa de relajar el castigo al ingreso de autopartes, en especial las que venían del Mercosur (Brasil). Esa práctica corre entre un piso y un techo: el piso es la necesidad estratégica de recrear y fortificar el tejido sectorial de autopartes que son el verdadero objetivo perseguido al sostener una industria automotriz: por cada puesto de trabajo dentro de una terminal se cuentan entre 2 y 3 puestos en la cadena de valor, un multiplicador de niveles excepcionales. El techo es la presión de las terminales en Brasil para liberar el comercio intra-Mercosur (hablamos de aranceles cero) y así llevar sus negocios a un óptimo de eficiencia: suplo autopartes desde el proveedor que tengo más desarrollado, el más eficiente, seguramente el más tradicional, o sea chau autopartista argento. Por suerte Lula ha entendido el criterio estratégico que primó del lado argentino. Después de todo lo dicho, esta discusión sigue favoreciendo al hermano verde-amarelo: las importaciones totales de la sección arancelaria suman casi 9418 millones de dólares, lo que implica un déficit de cuenta de 2841 millones de dólares. .


Segunda, tercera y quinta secciones (no electorales), alias “Productos Químicos y Conexos”, “Metales Comunes y sus Manufacturas” y “Materias Plásticas y Manufacturas” son tres casos muy interesantes. 43% de las MOI y 13% de las expos totales salen, en suma, por estos “canales”. Es interesante saber de qué se trata y prometemos hacerlo en futuros posts.



Por ahora sólo adelantamos la lógica que sigue el Sistema Armonizado (SA) y cómo leerla en el marco de exportaciones de “material de transporte terrestre”. Los capítulos del SA van del 1 al 97 y siguen una secuencia que viene dada por el valor agregado, la “complejidad” del producto, en orden creciente. Así, por ejemplo, el 01 son animales vivos (el único valor agregado fue alimentarlos y evitar que se enfermen) y el 97 son obras de arte (puro valor agregado que en algunos casos parece un cacho de tela pintada...) Los capítulos de “transporte terrestre” son 86 y 87, numeritos que dan cuenta de su alta complejidad. De manera que no nos meteremos más con ellos: está muy bien exportar por estos "canales". Y esta muy bien profundizar los ya existentes mecanismos (diseñados por esta administración, no por otras) para intentar quitarle asimetría al intercambio comercial de autopartes, en especial con el gigante vecino.



Veremos, seguro que siguen saliendo cosas interesantes.




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10 comentarios:

Mariano dijo...

Un gran trabajo, Contradicto. Y con una solidez envidiable.
Un abrazo.

Andrés el Viejo dijo...

Contradicto: desde que revuelve la basura de las oficinas, usted está levantando el nivel de este blog a alturas impensadas. Con usted y Mariano jugando en el terreno económico, yo puedo dejar de sanatear de economía y dedicarme a las bajezas políticas, que es en realidad lo mío.

Udi dijo...

Mi estimado Contradicto, me sumo a los elogios de Mariano y Andrés ¿No siente algo asi como que su abuela le diga lo grande y buen mozo que se ha puesto?
Y meteré un toque ácido en su descripción de la cadena de valor automotriz.
Si bien el produto terminado, como Usted consigna, es de "alta complejidad", la resultante en la generación de puestos de trabajo calificados y desarrollos tecnológicos autóctonos no emparda, ni a palos, esa performance.
Dos indicadores deberían ayudarnos a avalar esta afirmación:
1)El saldo de balanza comercial entre exportacionese de "Materiales de transporte terrestre" y "Elementos para el ensamble de dichos materiales". a cuenta, obvio, hay que buscarla en cada terminal.
Pero esta sencilla operación aritmética revela y oculta a la vez. Porque, entonces:
2)Qué se importa y qué se fabrica en el país para ensamblar dichos "Materiales, etc."
Vayamos por partes: si la ratio entre importacion y fabricacion nacional de un vehículo automotor es de, supongamos, 65% y 35% respectivamente, ya vamos viendo la punta, pero detrás de eso viene lo mejor, como decía mi tía, y yo no sabia de qué estaba hablando....
Bueno, que gran parte del 35 % de integración nacional del material automotor está compuesto por chasis, puertas, techo, y demás elementos de chapa, sin valor agregado muy importante.
Es decir: el costo de una puerta se compone de chapa, commoditie de precio internacional e industria capital intensiva, y algo de amortización de matricería, cuyos diseños, y software para realizarla vienen de afuera. (Algún dibujante indio sentado a su pc on line con un ingeniero italiano o alemán).
El corazón del auto o camión, viene de afuera: motor, caja, computadora de a bordo, componentes electrónicos, etc. Digamos, para abreviar: todo lo caro, chiquito, o que requiere de horas de ingeniería, diseño y banco de pruebas lo proveen las casas matrices o Brasil, China e India.
Para cambiar una coma en un plano los ingenieros argentos deben pedir permiso, amén de haber sido educados, en las últimas generaciones, al menos, para considerar que todo lo importado es mejor y mas barato...y generalmente tienen razón. Si lo medimos en los términos de costo-beneficio de la empresa. Ahora, si entendemos que hay ciertos precios que lo que pagan es el desarrollo autóctono, es decir: el beneficio social, creo que vale la pena pagarlo.
Salud y Resistencia !

Contradicto de San Telmo dijo...

Andrés y Mariano, les pido que a partir de mi próximo post por favor no comenten favorablemente.

Acabo de cerrar contrato con una ONG y me proveerán una claque de aduladores que aplaudirán con comentarios plagados de adjetivos amables todo lo que yo publique.

Mi autoestima igual les agradece.

Amigo Udi, usté está tratando de abuela a Andrés el Viejo?? No quiero meter cizaña pero...

Respecto de su toque ácido voy a hacer lo propio: llegar a un mix "origen importado / origen local" deseable es un viaje, no un destino. En esta industria, como en la mayoría, la que manda es la escala. En ese rango, observe que frente a los tres países que usté nombra, BIC (le faltó Rusia y quedábamos hechos) justamente lo que nos diferencia es la escala. De manera que Argentina juega con uno menos. Adivine quién aparece a zanjar la asimetría??? El Estado. El odiado, inefable Estado. Como diría alguien, "es la política".

Es la política la que tiene que forzar a las terminales locales a nacionalizar autopartes más y más. Ellos por motu propio nunca lo van a hacer. Cristina y su troupe tienen que condicionarlos y al mismo tiempo tener preparado el paraguas para el otro frente: cuando se impongan esas restricciones, ellos van a ir a la filial brasileña a llorar un rato y a acusar al estado argentino con su filial hermana mayor, que a su vez va a ir a quejarse al Estado brasileño. Y ahí está el otro frente que hay que tener aceitado de antemano: que el secretario de industria brasilero les diga que se queden tranquilos.

En algún post futuro (que no estoy comprometiendo aquí), hablemos de ese mito instalado por los que creen que saben: "las terminales automotrices argentinas son armadurías y ahora Cristina las subvenciona". Déjeme decirle algo, Udi, todas las terminales del mundo son armadurías.

Y el diseño, elemento clave en el agregado de valor que usté bien destaca, sigue reservado a las casas matrices. Sólo casos excepcionales (y hablo de excepcionalidades fuertes) admiten que el diseño pase al temido 3er mundo. EcoSport es un ejemplo válido. Usté no sabe como se multiplicaron las exigencias y los tests que le pidieron a la filial brasileña para validar el proyecto.

Pero algo tiene que quedar claro: sin las odiadas terminales no hay industria automotriz. Sólo 40 países en el mundo las tienen y nosotros somos uno. Para con ellos, una política de látigo y zanahoria y un Estado omnipresente.

Abrazo y gracias por sumar.

Mariano dijo...

El C4 es un ejemplo de diseño de 3º mundo (precisamente argentino) que se vende en el primero, no?

Contradicto de San Telmo dijo...

Rigurosamente hablando, el diseño del C4 es diseño de primer mundo. De tercer mundo es la fabricación y en efecto se vende en ciertos lugares del primer mundo.

El tema da pa mucho: minimización del número de plataformas, maximización del número de modelos, B-T-O o "build to order", ensamble modular, asignación regional de mercados atendidos, y un largo etc.

Uno cartoneando en la calle ve autos todo el tiempo y algo aprende. Pero quizás el tema merezca un post dedicado y criterioso (busquen a alguien que sepa, eso sí) en el futuro.

Si quiere, para saborear, le voy tirando una pastillita: hay una empresa que fábrica camiones en Brasil en la que NO HAY EMPLEADOS que dependen de esa terminal afectados en forma directa a la línea de montaje. Es decir, una fábrica sin operarios propios. Recepción de materiales, monitoreo, calidad, diseño, lo que quiera, pero no hay un sólo "ajustatuercas" que en el overol tenga el nombre del camión que fabrica. Son todos proveedores.

Le gustó?

Eso es una armaduría? Pues entonces "armaduría" es el futuro de esta industria.

Udi dijo...

Mis estimados Cartoneros: la irrupción de este blog ha traido un efluvio de ...de..., bueno ha traido un efluvio a la blogosfera, del cual lo menos que puede decirse es: ¡Bienvenido!
La prolija selección de los posts, la calidad de la escritura y el amble tratamiento a los comentaristas son poco frecuentes y merecen nuestra más cálida aprobación.
Sin olvidar que la armónica complementación entre los redactores lleva a que la lectura sea agradable y amena.
Hay que destacar el buen gusto en la edición de las imágenes y la acertada distribución espacial de las distintas temáticas, lo que hace que el recorrido por la página sea ágil y sencillo.
¡Enhorabuena!
udi, en un ataque de abuelidad.

Mariano dijo...

Udi nos está cargando. Pero igual le tenemos cariño.

Pensé que el C4 era diseñado acá.

Saludos

Andrés el Viejo dijo...

Se aclaró todo. La abuela no soy yo, es Udi.
Che, Udi, disimule un poco. Tampoco lo que le pagamos es para tanta exageración. Un tono más medido es más creíble.
Saludos

Udi dijo...

Andrés: a propósito, la transferencia aún no llegó, y en la última oportunidad que nos vimos me dijeron claramente "Despreocupate que lo tuyo esssstá".
Un abrazo !