miércoles, 28 de mayo de 2014

Brisa sobre los juncos


Ningún comentario de nuestros sempiternos economistas abonados permanentes a los estudios televisivos del prime time político, sobre lo que ocurre en Europa.

Parece que cuando las condiciones son favorables, Europa debe ser la estrella polar que guía, inalterable, nuestro destino.

Pero cuando los vientos cambian, se convierte en una tierra lejana cuya realidad no nos afecta, ni incide, ni tiene un pizca que ver con nuestro presente y nuestro futuro.

Nuestros gurúes locales no hacen ya ninguna mención de Europa, que no sea la frase Club de Paris, reducto selecto en el que un ministro de economía díscolo y rebelde deberá rendirse para ser luego bautizado en las aguas de la razón ortodoxa.

Lo que no nos dicen es que los intereses que motivaron a sabios doctores a dictaminar la eutanasia de varios estados de bienestar europeos en el último lustro son los mismos que operan aquí, día a día, hora a hora.

Nos invitan a reflexionar: el ajuste fiscal que proponen es el punto de apoyo arquimedeano desde el cual nos apalancarán hacia un futuro maravilloso. Una suerte de “retroceder este paso, para avanzar dos”. Una milagrosa “contracción expansiva”.

Es el mismo paso de danza conque desde 2008 vienen coaccionando a Grecia, España, Portugal, Italia, Irlanda (y la lista sigue).

Las pruebas están a la vista: uno de cada cuatro votos europeos el pasado domingo cayó en manos de la ultra-derecha. 140 de los 750 escaños del EuroCongreso serán de personas que, como si 1939 no hubiera ocurrido, ven a la inmigración y las razas como la causa de sus problemas. Propuestas de gobierno que hacen un eco indisimulable con noches de cristales, botas y brazos en alto hace nada más que 70 años.

En nuestro país los números que estos voceros deben desdibujar son contundentes. Entre 1989 y 2002 el neoliberalismo destruyó 2,5 millones de puestos de trabajo. En la últimos 11 años se revirtió esa tendencia maldita y se recrearon 3,3 millones. 

En los próximos diez años, sin considerar el incentivo inmigratorio que genera un mercado de trabajo con signos de vitalidad, quien gobierne tendrá la misión de crear 2 millones y medio más, sólo debido al crecimiento natural de nuestra población y a una convergencia a una tasa de desocupación aceptable (la actual, sin ser indeseable, dista de ser óptima) del orden del 4%.

Ningún candidato, especialmente en el arco opositor, hace mención a esta tarea y a su instrumentación política, social y económica. No dicen cuáles serán los vectores principales que traccionen al resto. Ni dicen como acallarán las voces que inevitablemente se alzarán por no contar con un silencioso y manso ejército de reserva.

Y si alguien decide no entender de qué estamos hablando, sirva recordar que este lunes y martes, con los resultados de las elecciones en los titulares noticiosos, todas las bolsas europeas mostraron crecimientos significativos: esos aplausos son exactamente lo que opina el capital del asedio a la democracia que se vive en el Viejo Continente.

Los discursos que llegan de más allá de las fronteras pueden sonar seductores, pero en un país como Brasil, que ha construido un tejido industrial envidiable, hace 30 años la manufactura era responsable por más del 26% de la creación de valor. Hoy esa cifra se ubica en el 14%.

Un proceso de primarización y desindustrialización está ocurriendo en toda la periferia mundial, puesto que el Tío Sam ha logrado cambiar su ecuación. Y con ella su discurso. Hace 20 años nos endulzaban los oídos con el cuentito de la inexorable y deseable transición de una economía de producción a una de servicios. Un altar frente al que todos los sacerdotes neoconservadores locales se arrodillaban. "Seamos una economía de servicios" aullaban mientras fantaseaban con privatizar el Banco Nación.

Era el cuento de la zorra y las uvas: un discurso que sólo justificaba el déficit energético que atravesaba la economía norteamericana.

Enormes yacimientos de gas y petróleo shale, oh coincidencia del mismo tipo que tuvimos la fortuna de encontrar en nuestro país, están siendo explotados actualmente en los Apalaches y la cuenca tejana.

Ahora que las uvas están al alcance, dejan de estar verdes. Esa nueva energía disponible es la que motorizará la re-industrialización norteamericana.

No solo representa la desmitificación de un discurso atrapa-zonzos. Significa también significa un desafío durísimo a la estrategia geo-política de todos los países que, con enorme esfuerzo, tratan de reponer la escalera que patean desde arriba. Solos. O preferentemente en bloque sudamericano. O definitiva y sorpresivamente, como parte de un eventual BRICS-A: defender con determinación la inédita recreación de un tejido productivo que nunca debimos permitir que se debilite y se pierda.

Antes de que terminemos de suspirar, también nosotros tendremos a disposición una fuente de energía hoy incomensurable. Le cabe a las fuerzas realmente nacionales y populares de nuestro país garantizar que el rumbo no será el de la vieja Europa. Y le cabe mostrar un camino cierto y seguro para una mejor, más profunda y más efectiva industrialización.


El resto, el resto es sólo brisa sobre los juncos.


sábado, 24 de mayo de 2014

7 Cajas



Anoche llegó a nuestra exclusiva Cinemateca Cartonera la película "7 Cajas", una excelente producción paraguaya del 2012 dirigida por Juan Carlos Maneglia y Tana Schembori (si la quiere conocer actuando, es la enfermera que orienta al personaje de Leti ingresando al hospital).

Por supuesto no comentaremos aquí ninguna escena ni tampoco haremos un juicio de valor; nunca estuvo entre los objetivos de este blog. Pero sí hacer nuestro pequeño aporte al cine latinoamericano, en este caso una obra de excelente factura, bien actuada, con un guión y una ambientación muy bien ensamblados, contando aventuras y peripecias de un muchachito que podría vivir en cualquier metrópoli de este lado del planeta.

La cinta pegada al comienzo de este blog es la mismísima película, aunque con subtitulado en inglés. Puede no ser la mejor elección, ya que un gran porcentaje del filme se habla en el "mezcladito" guaraní con español clásico de las barriadas humildes de Asunción que sería incomprensible para la mayoría de los argentinos, pero es la única versión completa colgada en youtube.

Quienes quieren una versión subtitulada en español, deberán hacer su esfuerzo pirata y descargarla de algún sombrío paraje en internet.

Disfrute esta película llena de lógica y al mismo tiempo impredecible.


miércoles, 14 de mayo de 2014

Sueños de Tango



Es noche. El salón está en penumbras. Las luces están en otros lugares. Las vemos sí, pero nos son indiferentes. Y ellas tampoco se preocupan por nosotros. Hay personas alrededor. No sé si son muchas. No sé si son cuántas. Risas contagiosas de mujeres, combustión buscada del champagne de la casa. Voces de hombres que tantean, mesurados, el teatro de operaciones que se abre con la risa de una mujer. El infinito arco de felicidades que se allanan a la noche, al alcohol, al tango. Y cuando mi mente empieza a perderse en caminos arrabaleros y mis pupilas no pueden dilatarse más, compenetradas en ese ambiente en el que el humo de los cigarrillos y las máquinas prefigura la antesala del infierno que alguna vez quiero conocer, justo en ese instante TU MANO

Ay, sí, (necesitaba) TU MANO perfecta se acerca a mi pecho, me busca peronomebusca, busca la textura de la tela de mi camisa que esas mismas manos ya tocaron, como preámbulo a que le dijeras a la vendedora “sí, esta, creo que le va a gustar” y ella consintiera, porque una vendedora sabe reconocer cuando buen gusto y pasión van de la mano y ahí está tu mano no hay nada más perfecto en el mundo que se detiene y tu cuerpo se me acerca y yo lo espero llegar y ya no hay gente ni luces ni máquinas de humo fake y tu boca se acerca a mi oído y te escucho decir “bailamos?” y es como una nueva religión un culto una plegaria y recibo el bautismo y te digo “claro” y me levanto primero para verte alzar a mi lado y ver como se alza el amazonas, te observo y me pregunto por qué sos tan sutil por qué no tengo dios al que agradecerle esto ni paraíso en el que dejar hecha la reserva, otros también te observan

TU CUERPO y yo nos separamos creo que puedo controlarlo un paso o dos mientras ubicás la cartera o las sillas o apurás un vaso o qué me importa y veo como cae desde tu cintura, como se tensa y se extiende la tela de tu vestido oscuro sobre tu cola de playas lejanas y arenas rubias sugiriendo todo ocultando todo y luego de haber recorrido ese morro vuelve como un Iguazú y se lanza al vacío, a ondular a flamear imperceptible muslo abajo hasta estallar junto a la rodilla donde el bies funde a negro y es el The End de esa obra de arte y empieza la verdad de tus gemelos y vienen tus ojos al rescate de mi a sacarme de esos abismos a revivirme

TUS OJOS que me increpan qué estas mirando tonto no habíamos dicho que bailábamos? claro claro estaba distraído digo por no confesar de una vez lo frágil que soy cuando estás cerca y vuelvo a tomar tu mano y te llevo despacio pero segura como kriptonita hacia el centro de la pista el centro sí el centro porque no querés exponerte porque estás apasionada por mí y querés intimidad si mejor lejos de las luces y las miradas y dale que el tango ya empezó y es uno de los que me gusta y ya llegamos, acá, acá está bien te acercás y no puedo respirar porque el fuego que me quema desde adentro cuando siento

TU BOCA cerca es asfixia y llega de nuevo tu mano a mi hombro mi espalda estás bien si estoy bien tus ojos me dicen que estás feliz shhhh tonto vos también y tomo aire, ahora puedo volver a respirar porque el tango me ayuda uno para inspirar y dos para exhalar y uno para recuperarme y dos para querer morirme y qué maravilloso es Chiqué y el salón es un sólo movimiento suave y cadente como una galaxia de parejas todas distintas como planetas todas explotando en un bigbang suave qué me importa el salón cuando tu cuerpo se acerca y tu mejilla me busca y mi mano se apoya sobre tu espalda y el dios, el que no tengo viene a salvarme otra vez y se ubica atrás tuyo y yo lo veo cuando te siento tan cerca

TU ESPALDA y vos no lo ves por suerte porque esta vez la cara del ángel es picardía creo que este no debe ser dios precisamente debe ser el diablo y está tan absorto como yo y ahora te siento unirte, entregarte y dos a la izquierda y ya estamos bailando y en tres y cuatro avanzo sobre vos esta es la parte que mas me gusta cuando sos vulnerable y me recibís y me hacés tu hombre y antes de cinco cruzaste y una mujer es perfecta en el cinco básico y ahí toda tu femineidad levanta vuelo y tu perfume que ya no es Perfume así con mayúscula sino el halo delicado de todo eso inexplicable que tengo entre mis brazos y tus preguntas y mis sueños estos son mis sueños y en casi todos estás vos y la década siguiente no lo sé porque no me importa mis sueños se construyen en minutos y fraguan en pocas horas y cuánto falta para el próximo…

-no importa
-te adoro
-yo también


viernes, 9 de mayo de 2014

Barbarita, dónde estás?



Conjurados y hábilmente desactivados por parte del gobierno los intentos de golpe de mercado, en primera instancia por vía de corrida cambiaria entre diciembre y enero pasados y luego por su sucedánea y peligrosísima espiralización de precios, las facciones dominantes ven cómo se agota el tiempo y se licúan las posibilidades de recrear las condiciones de sometimiento de los sectores populares y el retorno a las tradicionales políticas de ajuste del cinturón que, de aplicarse, afectaría centralmente a los sectores medios de la sociedad, que nuestros lectores no deben confundir con la autodenominada “clase media” que emerge a expresarse caceroludamente cada vez que le instalan un corralito, sea a sus ahorros más líquidos, sea a sus ilusión de seguridad en verdes.

Los días y las horas desesperantes que pasan y que, de no mediar novedades altisonantes, concluirían con el acto más imprevisto y elogiable de la historia argentina reciente: la entrega del bastón de mando y banda por parte de una presidente que siendo mujer, peronista y populista, cierra con ello el más exitoso y próspero doble período presidencial de nuestra historia.

Ese acto de civilidad  y democracia será, al mismo tiempo, una puñalada al corazón del poder vernáculo, un evento que ni siquiera un coronel viejo y zorro pudo cristalizar: la constatación meridiana y definitiva de que es absolutamente factible y no menos deseable un camino alternativo al del tedioso y repetitivo monólogo de la racionalidad dominante, camino que muy pocos países están recorriendo de una manera soberana y autónoma.

Este acto, independientemente de la ideología, la extracción y el perfil del futuro primer mandatario, le pone bien alto el listón de excelencia democrática y prepara a las tropas populares para el asedio ante la primera regresión gravosa en el camino trazado.

Es por aquellos bloopers veraniegos que los factores de poder han debido desplegar en las últimas semanas una nueva táctica de erosión que ponga contra las cuerdas y desoxigene al kirchnerismo. Creemos reconocerla y nos sorprende lo escuálido de su contenido.

El despliegue cuenta, cómo no, con el nutrido enjambre habitual: los tradicionales cucheteros del piso en vivo de TN, los inmaculados observatorios sociales del opus dei, el altisonante ciclo “Interrumpámonos sin Saber” en el prime time diario de America, las rigurosas y metódicas consultoras que compiten con el INDEC en el despliegue de recursos para averiguar la inflación pero nadie sabe como los pagan, en fin: el dispositivo de siempre, pero ahora anunciándonos que “estamos peor que en 2003, estamos peor que nunca”. 

Si no fueran gente peligrosa, casi podríamos afirmar que la idea fuerza fue diseñada por Capussotto y Saborido para su personaje Arnaldo Perez Manija

Desintegrar esta bola de nieve conceptual con la que intentan intimidarnos nos debe obligar a dos cosas: en primer lugar desestimar por capciosa la discusión sobre cuál es y dónde está la línea de pobreza; en segundo lugar ayudar a nuestros compatriotas a hacer un poco de memoria, la mayoría de nosotros guarda recuerdos y conciencia sobre la angustiante realidad que vivíamos en 2003.

La desintegración de la burbuja de jabón respecto del mito que se intenta instalar sobre crecimiento de la pobreza es muy sencilla y se ejecuta de la siguiente forma.

PRIMERO*
El producto bruto argentino (lo que vulgarmente denominamos LA TORTA) casi se duplicó entre el 2003 y 2013. Creció un 90%. No son datos propios. Son datos de la CEPAL. Guarde este dato en su calculadora por un ratito, solo un ratito.

SEGUNDO
En el mismo período (último trimestre 2003 vs último trimestre 2013) la reducción progresiva de la brecha de ingresos fue espectacular. Repito: ES-PEC-TA-CU-LAR. 

La relación de ingresos entre los hogares del decil (10%) más pobre y el decil más rico de nuestra población eran, en el último trimestre de 2003, de 24.14 veces.

La misma relación en noviembre pasado fue de 13.38 veces. 

Estamos diciendo que pobres y ricos acortaron la distancia económica que los separa a prácticamente la mitad.

TERCERO
El ingreso promedio en dólares de un hogar del decil más rico de la Argentina en 2003 era de 1.300 dólares. Diez años más tarde, en el tercer trimestre de 2013, ese valor fue de 3.894 dólares.

Para evitar la chicana barata, agreguemos que no son exactamente los mismos dólares: la deflección de esa moneda equivale a la inflación norteamericana en ese período: 24.7%

Eso nos permite decir que en dólares de 2003, el ingreso del decil más rico en 2013 fue de 3123 dólares, un crecimiento del 140% en términos reales

CUARTO
Los datos anteriores corresponden al último trimestre del 2013 y son los que utilizamos porque son lo último publicado. Para evitar el argumento de que omitimos la devaluación de enero de 2014, simplemente ajustamos todo lo dicho por la inflación del primer trimestre de 2014, que ronda el 10%. Es decir que la degradación de los términos está en ese orden.

ENTONCES
Juntamos todos los datos anteriores. Ni siquiera necesitamos una calculadora. Con buena leche alcanza:

  • Si la torta a repartir se duplicó.
  • Y si los ricos de ahora son más que el doble de ricos que en 2003.
  • Y si los pobres de 2013 están ahora a la mitad de "distancia de ingresos" de lo que estaban cuando nuestros ricos eran menos ricos, en 2003.

Cuál es el cálculo que los Melconian, los Loustau, los Sturzenegger, los Espert, los Broda hacen para decirnos, sin que se les mueva un músculo de la cara, que estamos peor que en el 2003????

NOS PREGUNTAMOS

Dónde están los clubes de trueque?

Dónde está el Tren Blanco de los cartoneros?

Dónde está Castells y sus cortes permanentes e interminables de Avenida de Mayo y 9 de Julio?

Dónde están las 17 provincias sin clases?

Dónde está “la crisis que causó dos nuevos muertos”?

Dónde está el aeropuerto de Ezeiza y las amargas despedidas de los que no aguantaban?  

Dónde está el 25% de desocupados?

Dónde está el 49% de precarizados?


Dónde está Barbarita, llorando de hambre?

Eso...

Dónde está Barbarita?




*IN TEMPO
El INDEC ha informado que el cambio de base de su Depto Cuentas Nacionales tendrá impacto sobre el cálculo de variación del PBI, y en las primeras estimaciones estos datos van a la baja. Los nuevos valores en el período descripto se estiman en el orden del 65%. Es de esperar que CEPAL acompañe con correcciones acorde.
Como sea, esta variación no hace mella sobre el análisis cualitativo ni cuantitativo del post: la sola confirmación de crecimiento o mantenimiento del producto nacional colabora sobre la tesis central: si hay más para repartir y se cumplen los postulados SEGUNDO, TERCERO Y CUARTO, todo lo dicho sigue valiendo.

martes, 6 de mayo de 2014

Pão de queijo nao tem carozo


Harina o fécula de mandioca, medio kilo
Leche, 200 ml.
Agua
Huevos, 3
Aceite común (girasol, maiz, soja), 100 ml
Sal
Queso rallado, una taza y media

En un almacén bien completo, o quizás una tienda de productos naturales, seguramente se podrá conseguir harina de mandioca, que se vende suelta o por kilo. Dependiendo del tamizado, puede estar identificada como "fécula" de mandioca. Cualquiera de ambas sirve a nuestros propósitos.

Fíjese que para todas las medidas de nuestra preparación es suficiente una taza o un vaso.

En una jarra tipo hervidor ponga a calentar una taza de leche, junto con media taza de agua y media taza de aceite. Agregue dos cucharaditas de sal y sólo deje calentar.

En un bol aparte disponga el medio kilo de harina de mandioca y cuando la preparación anterior llegue al hervor, vierta sobre la fécula. Mezcle con una cuchara o cucharon, todavía no con las manos (recuerde que estuvo hirviendo). Cuando todo esté mezclado vuelque el contenido de los dos primeros huevos y la taza y media de queso rallado. Puede poner dos tazas de queso, si le gusta exagerar.

Cuando la temperatura lo permita será el momento de meterle manos a la masa y mezclar todo muy bien, hasta que la masa se vuelva homogénea y maleable. La clave para saber si esta está en su punto justo es que despegue bien de la superficie plástica del bol, sin pegotearse. Si todavía estuviera muy seca, polvorienta, o se "resquebrajara", puede adicionarse el tercer huevo. Por el contrario, si está muy húmeda habrá que agregar un resto de harina o fécula.

Con la ayuda de una cuchara sopera y las manos haga bolitas del tamaño de albóndigas pequeñas que irá ordenando sin que se toquen en una bandeja (esta no necesita enmantecado ni harina, la masa tiene aceite). El horno precalentado debe estar alto (aprox. 230 grados). La cocción dura aproximadamente 30 minutos y la forma de identificar si la el punto es el correcto es la cáscara exterior, crocante y dorada.

En este mundial brasilero, con mate y amigos, el pão de queijo puede ser el conjuro para ganarle de una vez a Alemania, pasar a la ronda siguiente y quebrar esta sequía de 28 años.

Dedicado a @mendieta, que siempre está listo para experimentar.



domingo, 4 de mayo de 2014

No le eches más NAFTA, manito


Este año se cumplieron 20 años desde el lanzamiento del Acuerdo de Libre Comercio de América del Norte (NAFTA por sus siglas en inglés –dirían los compañeros de la MAK), un tratado trilateral que además de reportarle a los países miembro (Canadá, Estados Unidos y México) los beneficios propios de su mera existencia, en el clímax de la ola neoliberal que cubrió nuestro continente en la década del 90 se erigió como modelo (benchmark decían los chicos del CEMA) aspiracional de integración multilateral para un continente que marchaba hacia el fin de la historia cristalizado en la Globalización.

Afortunadamente nuestro país había firmado algunos años antes un tratado similar, pero distinto porque sus consorcistas eran países con los que existía mayor afinidad geoestratégica, política y económica. Hablamos del Mercosur, por supuesto, que nos permitió mantener a distancia los reiterados embates del Departamento de Estado norteamericano para consolidar NAFTA panamericano.

En particular el último y más consistente, denominado ALCA, que por suerte llegó demasiado tarde, cuando las evidencias de los efectos del neoliberalismo aplicado en América Latina eran desastrosas. Tres presidentes audaces se comprometieron a declinar la amable propuesta que se les hiciera en Mar del Plata, un memorable noviembre de 2005.

En esta oportunidad, considerando que ha transcurrido un tiempo prudencial en la vida del NAFTA, vale la pena realizar una evolución comparada de índices económicos y sociales de nuestro querido México, de los tres países el que cumple el rol más afín al que pretendía (pretenden) para nosotros y nuestros vecinos quienes proponían (proponen) con insistencia la implementación de un diseño tan estrambótico.

Tal comparación entre México y Argentina no es directa, puesto que en ese período nuestro país vivió dos historias bien diferentes. Nada grave: la inflexión económica, política y social ocurrida en el 2003 en Argentina se salva, estadísticamente hablando, aplicando una base de cálculo no usual.

Comercio Exterior
Empezamos por donde es más obvia la variación de performance. Lo primero que genera un TLC es un aumento de comercio exterior. Lo de México es fuerte: la suma de importaciones y exportaciones pasó de representar el 26% de su PBI en 1994 a casi el 64% en el 2012*. Para cualquier economía del mundo ese porcentaje es enorme.
Lo nuestro ha sido mucho más módico y contraintuitivo: pese al discurso dominante nuestra economía era bastante cerrada en los 90 y se abrió a los negocios en 2003, cuando nuestra industria encontró condiciones competitivas de exportación. En 2012 representaba el 31.5%.


Inversión Extranjera Directa - IED
Otra característica de los procesos globalizadores se ve en la IED que recibe cada país. Por supuesto que también aquí México nos supera sistemáticamente. Pero observemos qué indica CEPAL en los últimos años.


De la década del 90 vemos que sólo en 1999, año de la privatización de YPF, superamos a México en inversión extranjera directa (IED). Extraño porque nuestros gurúes nos contaban otra cosa, que eramos la panacea de la inversión. En el nuevo milenio nuestro esfuerzo por seducir inversores extranjeros no ha sido obvio y sin embargo paulatinamente vamos camino de superar a un México irregular.

Crecimiento del PBI
Ahora sí, vayamos a indicadores de efecto real sobre la economía. Empecemos por el más obvio: qué pasó con el Producto?


Aún considerando el comportamiento del PBI argentino en la década pasada bastante lamentable (ver cómo cae la línea azul hacia el 2002), la medición entre puntas para Argentina da 67 puntos. Para México da 45. El comportamiento de la economía argentina kirchnerista, tomando sólo la ventana 2003-2012 es aún más estruendoso: 70 a 25. Está claro que, como mecanismo para hacer crecer la torta, un TLC no da ninguna garantía.

PBI Per Capita
Puede ser que la perspectiva anterior sea pobre. Veamos por el lado de la potencialidad del PBI, que quizás ayuden al hermano del norte.

Valor Agregado Industria
Si un TLC se supone virtuoso, debería ser por el hecho de ampliar, mejorar y profundizar la producción industrial. Un parámetro disponible es el valor agregado industrial como porcentaje del PBI. 

Distribución del Ingreso - Indice Palma*
Si nada de lo anterior muestra ventajas para buscar un TLC, veamos qué pasa con la distribución del ingreso. Aquí los datos se calculan con mucha demora: último valor disponible de 2010. 
El índice de Palma muestra la proporción de ingresos entre el 10% más rico de la población y el 40% más pobre. Cuanto más bajo ese valor, mayor cohesión social.
México mejora, pero con mucha volatilidad. Argentina marca una fuerte tendencia a la homogenización social después de 2002. Lo de Brasil es excelente, sin palabras.


Quizás algún lector pueda inferir una mejora en algún parámetro. Aguardamos comentarios. 

Mientras tanto volvemos a apoyarnos en la recurrida sentencia: pobre México, tan lejos de Dios, tan cerca de Estados Unidos.


Todos los datos Base Banco Mundial excepto (*), origen CEPAL.

sábado, 3 de mayo de 2014

Pubricitos lus noruegus


Los voceros mediáticos sine die de los intereses concentrados siempre tienen un paisito modelo a mano para mostrarnos lo equivocado que es nuestro rumbo y la enorme brecha que hemos abierto frente quienes hacen los deberes con criterio, prolijidad y a conciencia.

Hace casi una década esos países modelo eran Irlanda y España. Autodenominados periodistas se babeaban encima por una notita en la que el subdirector de la Agencia Irlandesa de Control Aeroportuario nos contara a los torpes argentinos las bases del exitoso modelo irish.

Luego, por razones obvias, tuvieron que mostrarnos otros ejemplos: allí aparecieron Brasil y Chile, países con los que todavía hoy el capital concentrado hace pingües negocios financieros.

Desde la creación de la Alianza del Pacífico, en 2011, agregaron a esa lista de honor a sus otros miembros, Perú, Colombia, Costa Rica y México, que ya están pensando seriamente en un Acuerdo de Libre Comercio con Estados Unidos.

Nosotros, que tenemos la maldita costumbre de revisar la letra chica antes de hacernos socios de la Asociación Vecinal Las Gaviotas, nos tomamos el módico trabajo de analizar, con los últimos datos publicados por Cepal, de qué porcentaje del total de producto se apodera el sector 20% más rico de la población, o dicho en el lenguaje de la calle, con qué porción de la torta se queda el quintil superior.

Los sugestivos datos, que mostramos aquí, nos llaman la atención...



Será que el diagnóstico de nuestros honestos economistas y periodistas económicos es que ese 20% más rico la está pasando realmente mal y deberíamos pensar en cederles, digamos, 5 a 10 puntitos extra?

También pensamos en los pobres ricos noruegos.
Nos late que indudablemente la deben estar pasando muy mal.
Y sospechamos que tanto silencio ante tan poca riqueza no debe ser otra cosa que el disciplinamiento de un régimen tipo Chávez.

Como dijo el sapo