sábado, 24 de octubre de 2009

Belleza XII (Foto)



Mata Hari (1876-1917)

El 15 de octubre de 1917, en plena Primera Guerra Mundial, un pelotón de soldados franceses ejecutó a una bella mujer vestida de negro y con un gran sombrero del mismo color. El oficial a cargo del pelotón le disparó el tiro de gracia. Testigos del fusilamiento revelaron que la fusilada, momentos antes de que se diera la orden de fuego, mandó un beso con la mano a los soldados. Hay constancias de que sólo cuatro de los doce tiradores dio en el blanco.

La fusilada de ese día era Margaretha Geertruide Zelle, de origen holandés. Pero se la conocía más como Mata Hari, bailarina exótica, desnudista, aficionada a los hombres en general y a los uniformados en particular y acusada de espía. Su pudorosa vestimenta del día del fusilamiento contrastaba con la generosa exhibición de sus encantos que se puede apreciar en la fotografía.

Todos los estudios posteriores indican que la bella Margaretha, si realmente practicó el espionaje, lo hizo modestamente y que nunca tuvo acceso a grandes secretos. Incluso se estima que su tráfico de informaciones era de doble mano: parece que brindó datos sobre los franceses a los alemanes y viceversa.

Pero Francia había hecho un papel deplorable en la guerra. Las bajas se contaban por centenares de miles y no pocas eran debidas a la implacable política de fusilar soldados como castigo por deserción o por supuesta cobardía en el combate. Culpar a una mujer (y una mujer "de mala vida") por los desastres era una manera de entretener al pueblo, justificar las derrotas y estimular un patriotismo de opereta. Armado con estas consideraciones políticas, el tribunal la condenó con pruebas débiles y dudosas.

Mata Hari había nacido en Holanda en 1876 y a los 18 años se casó con un militar mucho mayor, con quien viajó a instalarse en la actual Indonesia, entonces colonia holandesa. La muerte de su hijo varón fue un duro golpe para el matrimonio. El marido se dio a la bebida y Margaretha se dedicó a aprender danzas locales y artes amatorias orientales que practicaba fuera de un matrimonio destruido.

El marido, borracho pero rencoroso, consiguió el divorcio y la guarda de la hija que les quedaba. Margaretha se vio literalmente en la calle. Aprovechó los rasgos orientales heredados de su madre y su conocimiento de la cultura javanesa para dedicarse en París al espectáculo, como bailarina exótica (y escasamente cubierta). Al éxito de esta actividad sumó una activa vida sentimental, que algunos pagaban con amor y otros con dinero. El día que la detuvieron y le comunicaron las acusaciones, exclamó: "¡Puta sí, pero traidora nunca!"

Su vieja pasión por los militares encontró un amplio terreno con la guerra, que hizo proliferar el número de uniformados. Sus andanzas con militares de toda nacionalidad disponible la hicieron sospechosa y la llevaron ante el pelotón.

Quedaron de ella abundantes fotos semidesnuda, vestida y en plena danza de los siete velos (una de sus especialidades). Y una leyenda de espía intrépida que, junto con sus perturbadoras imágenes, capturaron la imaginación del adolescente que fui alguna vez.

(Agradezco a la Museóloga que me haya traído a la memoria a Mata Hari con un documentado post en su blog.)

7 comentarios:

Nando Bonatto dijo...

Bueno ,al menos hubo soldados que se negaron a tirar en un acto callado de rebeldia,inutil quizas, pero rebeldia al fin

Anónimo dijo...

Demasiada cobardía en este mundo. Pero parece un síntoma de la humanidad, culpar a algunas mujeres-diosas por las miserias que nos acosan. Un abrazo.

Verboamérica dijo...

La mata hari demuestra que para algo le sirvieron a los holandeses sus dominios coloniales Oceanía.

Laura dijo...

Si te vas a inventar un pasado, que valga la pena. Es mejor descender de brahmanes, ser hija de una gloriosa bayadera del templo de Kanda Swany, que te adopten los sacerdotes del templo y te nombren "pupila de la aurora",aprender los sagrados ritos de la danzaq en la pagoda de Siva, taparse el pezón arrancado con cúppulas de bronce, que en el diario digan "Mata-Hari es Absaras, hermana de las ninfas,de las Ondinas, de las walkirias y de las náyades, creadas por Indra para la perdición de los hombres y de los sabios."... que ponerse Yenifer Yamila. tener un padre "empresario" ponerse siliconas y que en las revistas digan: Yamila: el culo de la temporada. Eso es estilo!

Andrés el Viejo dijo...

Fernando:
En realidad, fue un acto más callado que rebelde; no se negaron a tirar sino que lo hicieron para cualquier lado. Lo mismo, vale.
De vierde man:
No hay peor golpeador de mujeres que un cobarde.
Verboamérica:
Las colonias eran la única chance de que ese país calvinista produjera esa loca maravillosa.
Laura:
Tenía imaginación la chica. Y buen gusto para inventarse su propia historia.
Gracias por pasar

Agustina dijo...

Andres el Viejo:

Te agradezco mucho que hayas linkeado el conventillo. Tu página me gusta mucho y te sigo desde cuando eras mi comentarista favorito en el blog del inyenieri Sabriggi.

Saludos.... nos vemos en la blogosfera.

Andrés el Viejo dijo...

Agustina:
Yo soy el agradecido. Por haberme hecho acordar de Margaretha y por tus exagerados elogios.
Saludos