martes, 10 de noviembre de 2015
Final Feliz
...entonces el lobo llegó y se devoró a la Abuelita BoinaBlanca, se puso su gorro, sus lentes, su camisón, se metió en la cama y fingió dormir. No tuvo que esperar mucho, ya que Caperucita Roja llegó enseguida, feliz al encontrar a su abuela.
La niña se acercó a la cama pero pronto detectó que su abuela estaba muy cambiada y se detuvo.
- Abuelita, abuelita, pero qué devaluación más grande tienes!
- No te preocupes - dijo el lobo tratando de imitar la voz de la abuela – los precios ya son muy altos y no subirán más.
- Abuelita, abuelita, pero qué tarifas más grandes tienes!
- Tranquila, Caperucita, son para eliminar distorsiones que le hacen tanto mal a nuestro bosquecillo - siguió diciendo el lobo con su mejor voz de abuela.
- Abuelita, abuelita, pero qué despidos tan enormes tienes!
- Calma, Caperucita, el bosquecillo no tiene recursos para tantos duendes de La Cámpora, es demasiado déficit fiscal y tendremos que racionalizar – dijo el lobo mientras le extendía a Caperucita un hermoso globo amarillo.
- Abuelita, abuelita, pero qué endeudamiento gigante tienes!
- Es para someterte mejoooooorrrr!! gritó el lobo, saltó de la cama, se abalanzó sobre Caperucita y la devoro al igual que habia hecho con la abuelita.
Mientras tanto Daniel Osvaldo, el Cazador, habia quedado preocupado y creyendo adivinar las malas intenciones del lobo, decidió echar un vistazo a ver si todo iba bien en la casa de la Abuelita. Pidió ayuda a un campesino descamisado y los dos juntos llegaron al lugar.
Vieron la puerta de la casa abierta y al lobo tumbado en la cama, dormido de tan lleno que estaba. El cazador sacó su cuchillo y abrió el vientre del lobo y la Abuelita y Caperucita estaban alli, vivas! y saltaron a abrazarlo.
Y colorín colorado, esta campaña del miedo, ha terminado.
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