Esta es la historia de dos vecinos.
Uno con fama de ventajero, bastante chorro, hasta estafador a veces, pedante, peleador, pícaro.
El otro, en cambio, honesto, campechano, humilde, parecía puesto a propósito ahí, tan cerca del otro, para que quedaran bien claritas las diferencias.
Una burocracia de funcionamiento bastante aceitado, aunque no identificable como grupo homogeneo, se encargó de propalar esta "verdad", más mítica que empíricamente verificable, al punto que se convirtió en una de esas premisas implícitas que subyacen a toda manifestación discursiva.
Pero...un día La Haya juzgó que el que había violado, ignorado, incumplido los acuerdos contraidos con su vecino no era el chantún, sino el honesto.
Debería servir al menos, para que algunos se dejen de joder con los ejemplos estúpidos.
7 comentarios:
nunca tan de acuerdo. la imagen q se tiene del uruguayo es la misma que se puede tener de cualquier poblador argentino del interior del pais.
Y eso es lo generalizado, cuando seguramente los que estan involucrados directamente en esta joda no difieren de cualquier porteño.
Pero, Mariano ! ¿De qué van a vivir, si no es de sociología barata y extrapolaciones de goma todos los Aguinis, Sebrellis, Terragnos, etc. ?
A las dos horas de conocido el fallo el ex presidente Vázquez salió a decir "lo úunico ilegal es el corte del puente"...
Un campechano humildón que podría convertirse en ejemplo para muchos garcas argentinos.
Un capo, bah...
Y, don Maniqueo a veces la pifia, po
Yo quiero saber cuando se hace la marcha contra la inseguridad.
Saludos.
Y además comen pollo y se hacen putos....
Lo que me revienta de las generalizaciones es que las hace todo el mundo, todo el tiempo.
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